Transparencia en la gestión de la comunicación: 4 ideas iniciales
A raíz de mis más recientes posts (Pandillas, transparencia y conversaciones pendientes y Presidente, ciudadanos y apriorismos) en este blog ha crecido mi interés por profundizar en el tema de la transparencia en la gestión de los gobiernos y las empresas, particularmente los primeros. Pero no en lo que se refiere al gasto, sino en la gestión de su comunicación hacia la ciudadanía.
La tesis que pretendo sostener es que el nuevo orden que impone la cultura 2.0 ha redefinido la relación entre los gobiernos y la ciudadanía, demandando mayor transparencia y horizontalidad en la interacción. Para ello he estado navegando por diversos sitios de internet en busca de ideas y casos que me permitan desarrollar el tema. A continuación presento algunas ideas que han llamado mi atención hasta el momento:
1. En 2011 el Gral. Michael V. Hayden, Director de la CIA de 2006 a 2009, afirmaba que en el afán por manejar un discurso que se apegue a las demandas del público se tiende a distorsionar el lenguaje y, por lo tanto, afectar pensamiento. Ofrece como ejemplo el que se llamara a los ataques a Libia una “acción militar de tiempo y alcance limitado” en vez de lo que realmente era: una guerra. O que se intentara denominar “operaciones de contingencia” a la “guerra al terrorismo”. En síntesis, su mensaje es que hay que llamar a las cosas por su nombre. Eso también es transparencia. (artículo completo).
2. En un artículo de 2011 Amy Davidson, editora senior de The New Yorker señalaba una serie de incidentes en los que, a su juicio, se demostraba la confusión del gobierno entre reputación y realidad al invocar el state-secrets privilege para evadir la responsabilidad de “metidas de pata” (blunders) e incluso crímenes. Los casos que la editora de la revista cita están tomados de diversas publicaciones, demostrando el creciente interés de la sociedad por fiscalizar las acciones de sus gobernantes (artículo completo).
3. En 2010, durante una reunión de la International Open Government Data Conference acerca de la transparencia y los gobiernos abiertos se prohibió la transmisión por internet, el uso de Twitter y otras plataformas para bloguear en vivo durante la conferencia que ofreció una funcionaria muy allegada al Presidente Obama. Al señalarse esta paradoja, el vocero del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca dijo que se trató de un problema de procedimiento, no de política. De hecho, ningún comentario hecho durante la conferencia se consideraba confidencial. La moraleja: las políticas parecen avanzar más rápido en su concepción que en la práctica. Para equipararlas se requiere voluntad y trabajo (artículo completo).
4. La idea más desafiante es la expresada por el reconocido hacker Jacob Appelbaum en una entrevista de 2011 cuando afirma que los gobiernos que no son transparentes representan una amenaza a la libertad y una negación de los derechos humanos, pues propician inequidades en el acceso a la información. De esta forma, la discusión sobre transparencia pasa del plano práctico (combate a la corrupción) al de los valores y los principios (entrevista completa).
En fin, hay muchísima tela que cortar en lo referente a la transparencia en la gestión de la comunicación de los gobiernos. Más de una persona me ha hecho la observación de que cierta información debe ser siempre “secreto de estado”, que no puede divulgarse, por ejemplo, los planes de seguridad. Y aunque puedo estar de acuerdo con la reserva temporal de detalles tácticos y/o logísticos, creo que hay mucho camino por recorrer a nivel actitudinal y de responsabilidad individual.
Procuraré bloguear los avances de mi investigación, así como algunas elaboraciones propias a las que llegue ¡Cualquier aporte o sugerencia será bienvenido!
Federico Harrison
Rector de la Escuela de Comunicación Mónica Herrera. ECMH alumni
Buen artículo. Actualmente se está en el país con la ley de acceso a la información, Y hay un apartado de información confidencial.
Pero más que eso, es quizá crear la cultura de requerimiento de información (hablando del país) por parte de la población. Donde la población misma sepa sus derechos en esta área y los ejecute de forma apropiada.
Exijir información y ser capaces de debatirla, creo es nuestro reto … a corto plazo.
Carolina, gracias por el comentario. Definitivamente se trata de un tema de mucha trascendencia y con muchas aristas por explorar. Supe que El Salvador se adhirió recientemente al Open Government Partnership. Habrá que ver qué tal camina eso.
En todo caso, sigo investigando sobre el tema de transparencia y espero compartir próximamente algunas ideas. Estoy revisando un par de libros interesantes: Wikileaks and the Age of Transparency (2011) y Transgression 2.0 (2012). Ambos libros van por el lado de la cultura de la transparencia más que de su gestión administrativa.
Saludos,
FH