Si hicieras la cuenta de cuántas horas has pasado viendo videos en YouTube, estoy segura de que esas cifras no son modestas. Deben ser días, meses…¡años! de darle play a la ventanita y “dejar que cargue”.

En YouTube se ha desarrollado un lenguaje, diversos tipos de usuarios, códigos, signos y símbolos, un tipo de interacción, en fin, una forma de comunicación que ha llamado la atención a diversos investigadores. Michael Wesh, por ejemplo, catedrático de la universidad de Kansas en Etnografía Digital, ha realizado diversos estudios junto a sus alumnos para comprender el impacto de YouTube como “new media” en la cultura y la sociedad.

De hecho y como dato curioso, fue una conferencia de Michael Wesh en la que exponía el producto final de un estudio que sus alumnos realizaron de los usuarios de YouTube, la que inspiró la recién publicada investigación de la ECMH “YouTube: Vlogs, Interacción y Comunidades”. Este documento, cuyo sujeto de estudio fueron algunos vlogeros salvadoreños como Cheroger, Tamara García y ChávezVlog, buscaba comprender cómo se dan las interacciones entre vlogero y audiencia a través de YouTube explicadas desde el punto de vista de quien produce el video. También explora cómo se crea la identidad del vlogero y las herramientas que este utiliza para generar contenido y crear comunidad.

Como bien dice Wesh, analizar y comprender el comportamiento de las audiencias de la “new media” puede permitirnos comprender también el impacto que estas tienen en su comportamiento fuera de la esfera digital. En el caso específico de YouTube, por ejemplo, una plataforma que da acceso a contenido sin restricciones de horario, anuncios comerciales u otros impedimientos que pueden ser molestos, está dando paso -si no es que ya es definitivo- a una nueva forma de consumo televisivo.

Se hace necesario para la televisión entonces, repensar en un audiencia que ya no es pasiva y cuyo poder va mucho más alla de un control remoto. Es más, deberán dejar de pensar en UNA SOLA “audiencia” y empezar a pensar en MUCHOS Y DIFERENTES “usuarios”.

Y es que la semántica es poderosa. La palabra audiencia hace referencia a una sola masa que forma a un espectador pasivo cuya única función es presencial; sin embargo, el “new media” ha dado paso a los “usuarios”, palabra que en sí misma tiene implicaciones de poder, interactividad y acción, separando a cada uno de los implicados de una masa uniforme a través de necesidades y requerimientos únicos.

Ahora son los usuarios quienes tienen el poder de decidir cuál es el horario prime, calificar el contenido visto y comentarlo, saltar anuncios comerciales, en cuántos episodios quiere ver un programa, el tamaño y la resolución del video e incluso, quiénes son los protagonistas de sus historias. Estas son solo algunas de las posibilidades a las que los usuarios del “new media” están acostumbrados. Habrá que ver cómo los medios tradicionales se adaptan a estos requerimientos.

Mientras tanto, estimados usuarios, los invito a leer y compartir la investigación “YouTube: Vlogs, Interacción y Comunidades” que fue presentada el año pasado en el congreso FELAFACS 2012 y que también sirve como antesala para comprender cómo se están generando “los nuevos famosos”. Pero ese ya es tema de otro post.