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¿Cómo hace Facebook para decidir qué información poner en su Feed?

Al menos en mi caso, Facebook se ha empeñado en hacer un loop infinito de los posts de un mismo grupo de personas que, curiosamente, resultan tener intereses y gustos bastante afines a los míos; aunque mi relación con ellos en la plataforma sea reducida.

Recurrí entonces a mi amigo “Google” para saber ¿Cómo escoge Facebook qué poner en mi Feed? El hallazgo, ya me lo temía, tiene que ver con un algoritmo de esos Top Secret, que Mark Zuckurberg escribe en dos segundos y con los ojos vendados –según la película-.

Pero no hay ver esta dominación de Facebook sobre lo que vemos –y dejamos de ver- tan a la ligera. Resulta que estamos viviendo en una especie de burbuja cibernética que solo nos limita a la información que encontraremos afín, con la que por tanto, seguramente estaremos de acuerdo.

Al respecto, Eli Pariser hace una crítica y un llamado a los programadores de estos algoritmos, para que no limiten al extremo el contenido al que nos vemos expuestos. Esto, dice Eli, está en contra de una de principales ventajas del internet: la apertura a nuevas realidades.

Si el contenido que empezamos a recibir en Google y Facebook ha sido programado por máquinas que solo toman en cuenta nuestros “likes” y no nuestros “dislikes” ¿Qué posibilidades hay de expandir nuestras perspectivas y obtener nuevos aprendizajes?

La personalización de contenidos es un arma de doble filo.

En temas de marketing y comportamiento del consumidor, es un gran aliado para la segmentación y la costumización de publicidad.

Sin embargo, en términos de consumo cultural, construye una sólida muralla casi impenetrable para aquellos que no encajen en los filtros del robot programador.

Niel Postman, crítico de los medios, decía que estábamos caminando hacia una cultura del entretenimiento, que íbamos a divertirnos hasta morir. Y se comprende la buena intención de Facebook y Google por facilitarnos la vida al brindarnos la información que, de acuerdo a nuestro historial, aprobaríamos. Pero es también necesario confrontar esas ideas, propuestas y perspectivas con otras, aunque disientan de las nuestras.

Así que, si usted nota cierta recurrencia en su feed de Facebook, ya sabe por qué es.